EL GRAN DIRECTOR – DIVINO ALGUNOS PENSAMIENTOS SOBRE LA ASCENSIÓN…
Enero 26 de 2013
YO SOY el Gran Director Divino. ¡Felicitaciones y saludos a todos aquellos que estáis despiertos y conscientes en este tiempo de transición para vuestra raza y vuestro Planeta!
Hoy llegamos para prestar nuestra Luz a quienes aún están luchando para entender y emprender los siguientes pasos en la senda a la Ascensión.
Entendemos que muchos, incluso entre quienes se consideran Trabajadores de Luz, realmente no saben qué implica la Ascensión ni qué se requiere para entrar en la Senda de iniciación.
Esta senda conduce a la auto-comprobación de que tú eres Dios. No tienes que ir a ninguna parte ni estar en ninguna otra cosa que en total auto-aceptación.
Entiende que tú no eres la totalidad de Dios ni de la Creación, solamente una parte, pero como reflejado por una imagen holográfica, estás conectado con la totalidad.
El primer paso en este viaje de auto-descubrimiento yace en la total aceptación del yo, tal como eres; quizá no como te percibes.
La aceptación del yo es también un proceso de reconocimiento de que la oscuridad puede residir y reside en el interior.
Al observar la existencia de la oscuridad y elegir no hacer nada o dejarla ir, le quitas a la oscuridad del poder de enredarte en su enmarañada red.
Es en el tirón de la oscuridad donde uno pierde su camino, usando violencia y control para amarrar a otros.
Quizá estés en desacuerdo con la manera como alguien más presenta su punto de vista, arguyendo que tú sabes más; y que consecuentemente ellos deben seguir tu camino; éste es el camino de la oscuridad, por medio del control, el miedo, la limitación y la intimidación.
El 21 de Diciembre de 2012 el mundo pasó por un vórtice hacia una nueva fase de la existencia. Las viejas estructuras de apoyo de la oscuridad y su matriz, han sido retiradas permanentemente.
Todo aquello que se construya bajo la dirección de quienes adhieren al viejo paradigma, pasará, se desintegrará y eventualmente dejará de ser.
La longitud de esta transición será determinada por el Alma Colectiva de los Trabajadores de Luz, quienes ahora están anclando conscientemente la Luz en la Tierra; y trayendo a la manifestación un retorno a la Unidad de Consciencia. Son éstos quienes deben asumir, aquí y ahora, el liderazgo del resto de la Humanidad.
¿Estás tú preparado para la tarea, u otro debe tomar tu lugar?
Ya ha pasado el tiempo de sentiros intelectualmente, espiritualmente o materialmente superiores a otros Seres Humanos.
Lo que es material puede ser quitado. Puedes estar seguro de que si tu Karma exige equilibrio, llegará en la plenitud del tiempo.
Quienes se esfuerzan por sacar a la superficie cualquier oscuridad remanente en el interior de su propio ser, sea consciente o inconsciente, encontrarán que sus esfuerzos producen cierta cantidad de alivio en sus circunstancias.
El sufrimiento no puede ser evitado, pero tu disposición a hacer el trabajo interno, puede determinar el grado de sufrimiento que debe ser soportado, sea físico, emocional o mental.
Para las Semillas Estelares que llegaron a este mundo durante este particular ciclo, la Ascensión implica una reiteración de lo que han pasado antes, en muchas vidas y en otros planetas y en otros universos.
La Ascensión es parte del ciclo natural de la vida, pero su propósito no ha sido enseñado a las masas durante este tiempo presente en vuestro Planeta.
Aún así, quienes son Semillas Estelares se encontrarán naturalmente dirigidos, por la intuición y por la guía espiritual, a descubrir lo que es necesario para llevarlos por esta senda de regreso.
Sometiéndose voluntariamente a los exigentes requerimientos de la Ascensión física, los de la Simiente Estelar han aceptado el papel de Mostradores del Camino para la población de este Planeta.
Hubo un tiempo en el Planeta cuando la Ascensión era conocida y practicada por grupos de iniciados bajo la guía de sus líderes Crísticos.
Estas enseñanzas han sido ampliamente tergiversadas y/u ocultadas por los seguidores de la Hermandad Oscura, con el propósito de someter a la población general a sus controladores, vida tras vida de interminable esclavitud.
Vuestros antepasados espirituales previeron la llegada de un ciclo de oscuridad que sumiría temporalmente a este mundo en la superstición y el caos.
El final de ese ciclo está ahora en marcha. Conforme los Trabajadores de Luz se comprometen en su trabajo de Ascensión y auto-descubrimiento, elevando su vibración y frecuencia propias, llegará un tiempo de sincronía cuando la frecuencia de quienes los rodean también se elevará, por medio de la Ley de Correspondencia.
Vivir en un miasma de dudas y confusión no es el camino para aproximaros a vuestra Ascensión. Abandonar las dudas y prescindir de la confusión haciendo brillar la cruda luz de la honestidad en tu propia mente subconsciente e inconsciente, te capacitará para dejar ir lo que ya no te sirve.
Por medio de tus actos de contrición y auto-perdón, adelantarás y subirás, atrayendo a quienes van contigo.
Mientras el Planeta asciende a través de sus propios procesos de limpieza, lo mismo haréis vosotros. Deja ir todo lo que sientas que ya no es tuyo, ya sea que implique una relación, un trabajo que no satisface, creencias obsoletas, o viejos apegos que te atan a viejas maneras de ser que ya no te sirven… cualquier cosa que se atraviese en el camino. Sé fuerte, sé severo; pero equilibra esa severidad con bondad hacia ti mismo y hacia otros.
Criticarse y criticar a otros no es discernimiento. Lo que te funciona, no necesariamente les funcionará a otros.
Lo que otros ven y experimentan como el camino que quieren seguir, no necesariamente atrae tu atención. La comparación y el juicio son fútiles; y una pérdida de tiempo y esfuerzo.
Cada uno de vosotros es un ser único; y necesitará descubrir su propia senda de Ascensión.
La Ascensión es un proceso. Puede ocurrir y ocurrirá diariamente, siempre y cuando te comprometas completamente con el viaje.
No es un viaje fácil, pero te dará gran recompensa personal cuando la vida eventualmente se haga más fácil a medida que pasas por los varios niveles energéticos.
A lo largo del camino habrá pruebas para asegurar que sin duda hayas incorporado las lecciones presentadas durante el viaje.
Tu maestría sobre tus cuerpos físico, mental y emocional, será probada. ¿Puedes soportar dificultades y enfermedades sin quejarte?
¿Puedes soportar la crítica de otros que encontrarás el camino? ¿Exiges en otros la perfección, cuando no has logrado dominar la perfección en ti mismo?
Deja los juicios para el Alma y la Mónada. Estos maestros internos señalarán amorosamente tus defectos, no para juzgar ni condenar, sino para estimular el mejoramiento y el crecimiento.
Mientras que pasas por períodos de crecimiento, también encontrarás que experimentas períodos de quietud. Esto ocurre para que puedas incorporar completamente lo que has aprendido.
El proceso de aprendizaje es realmente un proceso de recordar o lograr una consciencia externa de todo aquello que ya existe en el interior.
La clave está en avanzar con los ojos abiertos de un niño, con el corazón abierto y una mente clara y sin sesgos, para que puedas encontrar deleite en lo que descubras, en lugar de confusión y desaliento.
Esta última es una indicación de que lo que descubras no tiene que coincidir con tus ideas previamente formadas de la realidad y de lo que eres, al menos temporalmente, en un estado de resistencia al cambio. Te corresponde a ti y solamente a ti estar dispuesto a abrirte al cambio, porque ésa es la única manera como podrás crecer.
Mientras trepas por la Senda, descubrirás que la realidad no siempre es lo que te han enseñado tus padres y otras figuras de autoridad, en ésta o en cualquier otra vida física.
El mundo del Espíritu y las dimensiones superiores no funcionan con las mismas leyes físicas bajo las cuales vivís en la superficie.
A medida que asciendas en tu consciencia, estos mundos internos comenzarán a revelarse a ti, como han sido descubiertos por aquellos dedicados a la meditación.
Al comienzo, estas experiencias serán muy personales; y luego, eventualmente, comenzarás a descubrir correlaciones entre los mundos interno y externo, superior e inferior.
Las señales están allí, pero no se hacen aparentes hasta que quien está ascendiendo esté listo para ver, oír o sentir su presencia.
A medida que ganas en consciencia espiritual, comenzarás a abrirte a una sensación de la comunidad mayor que existe alrededor de ti.
El mundo natural nunca ha abandonado esta Consciencia de Unidad. La descubrirás tú mismo, a tu propia manera.
Y a medida que tus sentidos espirituales comienzan a despertar, podrás discernir más de lo que hay para ver y experimentar en este mundo, sin dejar eso sólo para otros.
Vuestro mundo necesita sanación. Cada uno de vosotros necesita sanación.
Voluntariamente habéis emprendido este proceso como una manera de sanar al mundo y anclar la Luz de los Cielos en la tierra sagrada de vuestro Planeta. La Luz y el Amor del Cielo serán anclados a través de vuestros cuerpos físicos.
Vosotros sois los transformadores que bajáis esta enorme Luz a través de vuestros propios cuerpos. Para llevar a cabo esta sagrada tarea, se ha requerido mucha preparación para que vuestros cuerpos no fueran destruídos por las energías entrantes.
No te sorprendas si aún estás experimentando desafíos físicos, pues las energías están aún incrementándose en ciclos.
Llegará un momento en el cual las energías disminuyan, pero ese tiempo aún no ha llegado. Así que sé amable con tu cuerpo y contigo mismo. El cambio es exigente y puede ser estresante.
No cometas el error de juzgar a aquellos individuos que dejan el Planeta durante estos días de transición. Cada uno tiene su propio Viaje Álmico qué hacer.
Algunos retornarán casi inmediatamente en un cuerpo nuevo, como jóvenes niños cristal. Algunos irán a tierras de verano para tener más entrenamiento y quizá un tiempo de descanso, antes de emprender otra vida.
Algunas Almas elegirán trabajar desde los planos espirituales.
Otras retornarán a sus Hogares, habiendo terminado el trabajo delineado en su contrato álmico.
Otras se mudarán a otros planetas y sistemas solares que corresponden más con su vibración, como preparación para otras vidas y otras lecciones, hasta que estén listas también para emprender la senda de retorno.
La oportunidad y la Senda son muy individuales para todas y cada una de las Almas, incluso para aquellas que actualmente son consideradas las más oscuras de las oscuras.
Todas son una en Dios. Todas existen en Dios. El Yin y el Yang, la oscuridad y la Luz, masculino y femenino, todos existen en el Uno.
Como la Hermandad de la Luz, estamos con vosotros para ayudaros cuando lo necesite alguno o todos los que nos llamen.
Nosotros oímos cada palabra, cada pensamiento y cada sentimiento. Nosotros no juzgamos. No os regañaremos, sino que trataremos de estimularos y ayudaros a llegar a una aceptación de vuestro propio poder y belleza.
Nosotros no podemos hacer el viaje por ti; a ti y solamente a ti te corresponde hacer el trabajo, pero nosotros ayudaremos y asistiremos de cualquier manera aceptada por la Ley Cósmica.
Nuestras bendiciones van para todos. Conocednos como vuestros hermanos y hermanas que siempre estamos junto a vosotros.
Vosotros sois conocidos y amados como las Almas más fuertes y valientes, para emprender esta gran jornada desde la separación hacia la Unidad de Consciencia.
Os dejamos con un pensamiento más en el cual reflexionar: Para ascender no es necesario ser perfecto. Incluso el más alto de los iniciados encara sus propias batallas y victorias internas.
Volveremos. Hasta entonces, Namasté: Nos inclinamos ante el Dios y la Diosa dentro de cada uno de vosotros.
Gracias, vuestro Amado Gran Director Divino.
Canalizado por Tazjima
Tradujo: Jairo Rodríguez R.
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