27-10- 2013
Tu destino es crear con Dios, habías olvidado esto y durante millones de años, has estado intentando crear sin su amorosa guía y estímulo.
Están en la cúspide de enormes cambios en la forma de experimentar la vida, cambios monumentales que les inspirarán y elevarán, cambios que fueron planificados desde el momento de tu aparente separación de la Fuente.
Siempre estás en armonía con la Fuente, conectado eternamente a la fuerza creativa.
Sin esa conexión no habría conciencia, no habría entendimiento, no hay nada, y eso es imposible, porque la Fuente nunca ha tenido comienzo y no tiene fin, sólo se encuentra en todo su esplendor, eternamente, más allá del tiempo que es puramente ilusorio.
Su amor y su luz brillan en ti en todo momento determinando y asegurando tu existencia eterna.
Solo que has elegido temporalmente no ser consciente de ello. Y ahora la conciencia de ese desconocimiento se filtra suavemente, irresistiblemente, en la conciencia de la humanidad, disolviéndolo.
La atención en las distracciones de la ilusión, que son muchas y variadas, y hasta ahora totalmente fascinantes, se está debilitando cuando tu fascinación por ellas se convierte en obsoleta, aburrida.
En cambio, tus talentos creativos naturales están siendo despertados y exigiendo tu atención, que es como debe ser, porque cuando fluyen libre y espontáneamente, te traen alegría y satisfacción sin medida.
Tu destino es crear con Dios, habías olvidado esto y durante millones de años, has estado intentando crear sin su amorosa guía y estímulo.
Has intentado ir solo, y al hacerlo, has puesto restricciones increíbles en tus talentos dados por Dios y en tus poderes creativos.
Esta carencia te ha llevado a ver el aparente éxito de los demás con el aumento de la envidia y el descontento, mientras que ellos, impulsados por los mismísimos sentimientos, te miran con la misma consternación, el resultado es que han estado compitiendo ferozmente, en vez de cooperar en armonía y Amor, transitando constantemente por el camino de la amargura y el resentimiento en el que culpan con frecuencia a Dios!
Pero es tu camino, lo elegiste y lo restableces en cada momento mediante tus creencias.
Las creencias son muy fuertes, sin embargo, siempre tienes la opción de cambiarlas, y hacerlo con la ayuda amorosa de tus guías, mentores, y ángeles te ayudará en tu proceso de despertar.
Habla con ellos y escúchalos en tus momentos de tranquilidad cotidiana, es esencial para tu bienestar y para disolver la amargura a la que muchos se han convertido en adictos.
Ustedes todos son aspectos divinos y hermosos del Uno, y una vez que aceptan esto, y lo saben, sus egos se unificarán e integrarán a la totalidad que cada uno es, y eso es lo que ellos temen más que a nada.
Una vez que esto suceda, ellos también estarán felices. Lo que temen es a lo desconocido, y es desconocido para ellos, porque no llegan a ser tan siquiera, básicamente, caricaturas de lo que realmente son, a partir de la separación ilusoria de tu origen divino.
Ellos saben que la separación fue un error, un gran error, pero no saben por qué y temen represalias.
Si hubieran experimentado la Fuente no tendrían miedo, ellos conocerían sólo el Amor.
Sin embargo, los han creado a los efectos de la separación, para establecer límites en su conocimiento, en su conciencia, y por lo tanto, para sus egos, hay esta enorme sensación de peligro inminente cuando la muerte del cuerpo se cierne delante de ellos, ese inevitable aspecto terrorífico de la encarnación terrena de la humanidad.
Cuando creen ser solo cuerpos que tienen una vida corta, limitada y básicamente insatisfactoria, que están siempre en peligro de perderla debido a una catástrofe personal o de toda la sociedad, esa es la imagen que sus egos les presentan, y efectivamente están siendo presionados por sus egos a la lucha por evitar lo inevitable, mediante cualquier vía que puedan imaginar.
Una de las más obvias es mediante el aprovechamiento de las desgracias de los demás y e intentar ofrecerlos a ellos en vez de a sí mismos para el castigo divino esperado.
Es a partir de ese miedo que el sacrificio humano nació. Ese miedo permanece y los seres humanos continúan sacrificándose unos a otros de manera indiscriminada en todo el mundo.
En general no se llama sacrificio, sino sutil interés propio – el único que va a cuidar de ti eres tú mismo!
Como Portadores de luz y Guías del sendero están plenamente conscientes de que hay un Ser divino, una Fuente, Dios, que es Amor, quien te ama incondicionalmente en cada momento.
Estás actualmente encarnado para traer las energías del Amor a la humanidad, mediante la conexión con ellas y el compartirlas de manera indiscriminada en todo momento.
El número de los que hacen esto ha crecido exponencialmente en las últimas décadas y los resultados son evidentes por el gran aumento en la atención compasiva que se presta a los derechos humanos básicos y a la necesidad de atender a los pobres, a los enfermos y a los ancianos.
Esta es la compasión en acción, y como el campo del Amor en el que opera se expande, más y más personas se están vinculando entre sí para empezar a resolver estos problemas.
Además, como resultado de la compasión cada vez mayor en todo el mundo, aquellos que pasan cruel y toscamente sobre los demás, se están encontrando cada vez más marginados y ya no son libres de tratar a sus semejantes con el desdén que ha sido endémico en este planeta.
Una conciencia colectiva se ha desarrollado, que está arreglando los males que durante tanto tiempo se han aceptado como un comportamiento normal.
Estos son los signos edificantes que la Nueva Era a empezado a mostrar.
El Amor, la aceptación, el perdón y la compasión están brotando en algunos de los lugares más inesperados, trayendo esperanza y alivio a los que se habían encontrado a sí mismos arrastrados ante la desesperanza y la desesperación de una máquina inhumana que fue construida para reprimirlos, controlarlos, y luego tirarlos a la basura como algo sin valor.
Esa máquina se está derrumbando, disgregándose, y está en fase de desmantelamiento, ya que el cuerpo político descubre que la humanidad en general ya no está dispuesta a sentarse tranquilamente bajo ese yugo pésimo y totalmente inaceptable de la supresión.
La Luz del Amor de Dios se está extendiendo como un reguero de pólvora por todo el planeta, y es inextinguible.
Abarca todo a su paso, atrayéndolos hacia sí misma en aceptación tierna e incondicional, exigiendo nada y ofreciendo, como siempre lo ha hecho, todo.
Encuentra ese Amor ardiendo brillantemente en tu interior cuando te tomes el tiempo para la oración, la relajación o la meditación.
Es la fuerza de la vida, y es tuya, presente permanentemente en tu interior, abre tu corazón para recibirla.
Esta nunca, por ninguna razón en absoluto, te será retirada, porque es el don eterno del Padre para ti.
Con muchísimo Amor, Saúl.
Traductor: Rossana Carmona
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