18-12-2013
Queridos amigos: Soy la voz de la Tierra. Sientan mi presencia aquí dentro de ustedes y debajo de sus pies.
Estoy presente en su cuerpo; fluyo a través de todas sus células. Y a través de su cuerpo es como ustedes están conectados con la naturaleza, con todo lo que crece, vive y respira a su entorno.
Vuélvanse conscientes de la presencia viva de la naturaleza a su alrededor aquí, en este momento.
Sientan los árboles alrededor de este edificio, la tierra sobre la que está este edificio; sientan las plantas, los pájaros y los árboles.
Si observan estrechamente pueden sentir cómo su presencia afecta a esos seres vivos también.
No sólo los sienten, sino que ellos también los sienten a ustedes. Inclusive este edificio está vivo porque todo aquello a partir de lo cual fue hecho originalmente contiene las energías de la Tierra.
Hay conciencia en todo a su alrededor. La materia es conciencia animada. Sientan la energía, la conciencia, en este edificio, su historia y lo que ustedes le traen. Ustedes subestiman frecuentemente el efecto que tienen simplemente estando en algún lado.
Ahora vayan más profundo en su cuerpo. Justo como observaron sus alrededores con su conciencia, hagan esto ahora con su cuerpo de una manera muy objectiva: sientan su cabeza, su garganta, su pecho.
Luego vayan más profundo en su abdomen y sientan mi energía – yo los guiaré. Les doy la bienvenida cuando hacen esto.
Yo estoy viva también; tengo mi propia conciencia. Sientan cómo los asisto atrayéndolos más profundo en su cuerpo a medida que descienden a lo largo de su espina dorsal hasta llegar a su coxis.
Sientan mi nutriente energía puesto que yo soy su madre. Siéntanme en sus muslos y rodillas, sus pantorrillas y tobillos, y a lo largo de sus pies.
Hoy vamos a quedarnos aquí abajo, en esta parte de su cuerpo. Hay una vieja idea inculcada en la mente de la gente de que la inspiración viene desde arriba, que el profundo entendimiento espiritual nace de una conexión con lo celestial, lo cósmico, aquello que se encuentra arriba de ustedes; pero hoy les voy a pedir que presten atención a lo que yace debajo suyo, el suelo debajo de sus pies, la Tierra viviente.
Muchos de ustedes han experimentado dolor, desilusión, profunda tristeza, o soledad, lo cual se ha quedado atrapado en sus chakras inferiores.
Como resultado, su estado consciente ha ascendido, junto con su conciencia – ha dejado su cuerpo, por así decirlo – porque todas las emociones que ustedes han tenido a nivel terrenal han sido demasiado dolorosas para que las experimenten.
Yo lo entiendo, y entiendo también cuán difícil es descender plenamente a un área de su cuerpo que se siente tan vulnerable. Esto requiere de una entrega total, una profunda fe en la vida.
Es muy humano erigir una coraza protectora cuando se sienten seriamente heridos. Sin embargo, dicha coraza los retiene atrás en la vida; les roba de su más profunda fuerza, y no pueden vivir así porque haciéndolo los detiene como si estuvieran en una prisión.
No obstante, el flujo de la vida, el poder del Ser, siempre es más fuerte que las prisiones que ustedes erigen dentro de sí.
Desde su Ser siempre hay otro empuje, una fuerza impulsora hacia la apertura y la entrega a la vida, a Todo Lo Que Es.
Las heridas emocionales que ustedes han sufrido son heridas que han sido infligidas aquí en la Tierra.
Pudieran haber sucedido en esta vida o en vidas pasadas, pero como fueron sustentadas aquí en la Tierra y están en su memoria del Ser, ustedes han asociado a la Tierra con un lugar violento, un lugar que es rudo, atemorizante, amenazante.
Cuando ustedes regresan aquí y se encarnan de nuevo, y escuchan otra vez el llamado de su Ser – porque no se puede detener y seguirá tocando una y otra vez a su puerta – ustedes se pueden abrir probablemente a este llamado al nivel de su corazón, pero cuando van más profundo en su cuerpo esto se vuelve algo tan atemorizante que ustedes retiran su estado consciente de esta parte de su cuerpo.
Luego ustedes se vuelven un Ser dividido. Una parte de ustedes dice “sí” y quiere avanzar adelante porque siente la radiantez, la invitación a un nuevo tiempo; pero las partes abajo del corazón, las chakras inferiores, no se atreven a involucrarse por lo que permanecen cerradas.
Hoy deseo ofrecerles una manera de recobrar su confianza en esa parte de ustedes. Me gustaría señalar que los temores que ustedes portan consigo se han originado principalmente en la sociedad humana en el pasado, con las energías que prevalecían en ese entonces, por las que ustedes se han sentido rechazados y no bienvenidos.
Recuerden que ustedes tienen también una conexión con la Tierra misma – conmigo – independientemente de toda forma de pensamiento humano y energías colectivas rodeando a la Tierra.
A mí también me gustaría liberarme a mí misma de estas energías negativas; yo estoy también en una senda de crecimiento interior y evolución, y estoy pasando por un proceso de renacimiento.
Reemergeré en un nuevo tiempo en el que hay una mayor armonía entre los humanos y la naturaleza.
Nos ayuda a ambos si se recuerdan a sí mismos quién soy yo en realidad, mi esencia viviente. Conectándose conmigo, con la conciencia que está tan ansiosa de darles la bienvenida, ustedes borran las memorias dolorosas del pasado.
Pruébenlo. Permitan a sus chakras inferiores, las que están en su abdomen y sus piernas, llenarse con el poder de la Tierra.
Me gustaría ofrecerles algo, un breve viaje guiado para ayudarlos a sentir esa energía más plenamente. Hay todo tipo de reinos de la naturaleza rodeándolos, ricamente habitados por diversas criaturas que viven en la Tierra. Cada una aporta su propia contribución como una parte del Todo.
Les pido ahora que piensen sobre un árbol bien enraízado que ha estado de pie allí por un largo tiempo.
Su corona alcanza el cielo, mientras que sus raíces se sumergen profundo en el suelo. Encuéntrense con la esencia de este árbol por un momento, con una luz y un juguetón sentimiento.
Imagínense simplemente que están sentados dentro del árbol, y sientan con su conciencia su silencioso, estable y asentado poder.
Desciendan a sus raíces; sientan cómo vive, crece e irradia este Ser su energía en la Tierra. Sientan lo que el árbol les ofrece, cuál aspecto de su energía les atrae más.
Permitan que esa energía fluya a través de ustedes y recíbanla, y sientan lo que el árbol desea recibir de ustedes porque hay un intercambio en todo.
Él siente su presencia, al igual que ustedes sienten su presencia. El árbol también es una energía viviente y está consciente de ustedes también. Vean cómo experimenta él su visita.
Me gustaría contarles más sobre esta experiencia. Ustedes se ven a sí mismos con frecuencia como el gran despojador en la Tierra, aquél que la contamina y trastorna su balance natural.
Eso es verdad hasta cierto punto porque hay una profunda disarmonía entre los humanos y la naturaleza en este tiempo; pero quiero recordarles que yo, la Tierra, y todos mis reinos naturales les damos la bienvenida.
Ustedes son bienvenidos en la Tierra. Nosotros disfrutamos y nos beneficiamos de su presencia y su energía.
Ustedes vienen aquí a traer algo nuevo y excepcional: vienen a compartir su Luz estelar y su sabiduría cósmica.
En cierto sentido, todos ustedes son visitantes aquí. Con un pie, ustedes son parte de la Tierra, un Ser físico justo como los animales y las plantas; y sin embargo, al mismo tiempo ustedes vienen a la Tierra a traer algo más, una manera enteramente nueva de ser.
Ustedes tienen libertad, libre albedrío. Se pueden desarrollar; pueden canalizar Luz a la Tierra, algo que da un nuevo ímpetu a toda la vida aquí.
Sientan por un momento la interacción entre los humanos y la naturaleza dentro de ese árbol. Sientan que el árbol disfruta y está eufórico por su presencia.
Esto pone algo en movimiento, que es simplemente el flujo del Amor. Aquello que ustedes son en realidad afecta al árbol muy profundamente.
Ustedes pueden ver eso de maneras ordinarias en sus alrededores, en su jardín, en sus mascotas. Cuando interactúan íntimamente con sus mascotas, ellas les dan a ustedes algo a su vez.
Les pido ahora que elijan un animal que desee venir a ustedes para aclarar algo. Permitan que se aparezca en su imaginación.
Un animal desea venir a ustedes para ayudarlos a sentirse bien y a salvo en la Tierra, y a estar bien conectados con el suelo bajo ustedes a fin de que estén listos para manifestar ustedes mismos con seguridad y sintiéndose a salvo.
El animal conoce la seguridad, ese refugio. Por naturaleza es uno con la Tierra y no tiene dudas sobre su derecho a existir. Simplemente existe, vive, respira y crece.
Entren a su conciencia con ese animal. Permítanse fusionarse con él con facilidad. Sientan por un momento la carencia de procesos mentales en este animal que no está plagado de excesivos pensamientos como los humanos lo están.
Sientan cómo fluye la naturaleza sin esfuerzo a través de él. Reciban lo que necesitan, lo que los conmueva en este animal; sientan cuánto los acerca a la Tierra, sientan la pureza, la integridad de este animal.
Vean lo que el animal siente acerca de su venida aquí y cómo ustedes fusionan su energía con la energía de este animal.
Sientan que su energía es bienvenida, que conmueve algo en el animal, le hace bien y lo estimula. Hay una interacción entre ambos.
Su animal les pide que se familiaricen con las energías de la naturaleza para que empiecen a sentirse en casa en la Tierra, y sepan que hay un lugar aquí para ustedes.
Y para ponerlo en términos más fuertes, los reinos de la naturaleza los están aguardando. Nosotros deseamos ser inspirados por la energía que ustedes traen. A cambio, nosotros los queremos recibir para que se vuelvan parte de nuestra Totalidad. Ustedes son muy bienvenidos aquí.
Estoy agradecida por su coraje y perseverancia. Estamos avanzando a una nueva era en la Tierra. En esa nueva era es esencial que los Seres humanos y la naturaleza trabajen juntos de nuevo a partir de una conexión interna.
Todo es consciente y desea cooperar unos con otros. Así es como se supone debe ser. Cada criatura natural siente que es una parte del Todo.
Mi más profundo deseo es que ustedes sepan que son también una parte del Todo aquí en la Tierra, que la experimenten como su Hogar, no sólo siendo Seres de origen cósmico, sino que la experimenten estando con las criaturas vivientes a su alrededor.
Celebren la vida con todo lo que está aquí; ésa es la gran labor ante la humanidad hoy que hará fructificar a la Tierra y hará de todos ustedes unos Seres inspirados y gozosos.
Canalizadora: Pamela Kribbe
en: www.jeshua.net
Traducción de Maria Baes y Frank Tehan
WebSite: http://despertando.me/?p=139361
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