Una de la más escandalosas contradicciones de la mayor parte de los gurús de la Nueva Era es cuando afirman que “no hay un Dios afuera sino que está en el interior de cada uno de nosotros: en nuestro interior”.
Y es escandaloso porque quienes así hablan ¡son los mismos que fustigan la “dualidad” como el mal más horrible del mundo mundial!! ¡Se puede ser más tramposo?
O sea, que combaten la dualidad pero ellos ¡sin darse cuenta! la propagan. ¿O que cosa es más que dualidad tener que decidir entre “el Dios de fuera” y “el Dios de dentro”?
Puede que te parezca una cuestión baladí pero, como verás seguidamente, esta discusión tiene unas derivaciones prácticamente totales para tu vida diaria.
¿En qué se diferencia creer que “Dios está fuera” de afirmar que “Dios está dentro”?
Bien, la evidencia de que llevamos a Dios en nuestro interior, nos hace capaces de superarnos y de dar lo mejor de nosotros mismos: no creo que nadie pueda negar que esto es algo positivo y es lo que hace que libros como El Secreto atraigan a tanta gente.
OK. ¿Dónde está la diferencia en que “Dios solo esté en el interior y no en el exterior, como una entidad diferenciada”?
Pues muy fácil: si Dios está en el interior de cada uno de nosotros pero no afuera, podemos hacer lo que nos dé la gana sin importarnos las consecuencias que nuestros actos tengan sobre los demás: aquí reside el principio número uno del Egoísmo New Age. Como “yo soy dios” sólo me importa yo mismo y no hay moral por encima de mí: nadie puede juzgarme (ved la obsesión siempre de los new age por evitar esta palabra). Evidentemente, como no hay una entidad que nos una a todos, no hay Verdad (¡por eso escuchas a los gurús new age que han alentado esta era de la mentira, afirmar que no hay verdad ni mentira, que eso es dualidad!) ni tampoco posibilidad de ponernos de acuerdo en nada (salvo con la coacción de las sonrisitas y los abracitos; si se aprovechan de ti o te manipulan con un abrazo y una sonrisa de por medio, entonces, todo perfecto, ¡es amor!). Ni tampoco hay Bien ni Mal, por supuesto: repásate los comentarios del gurú Matías de Estéfano, por ejemplo. Esto se traduce en “barra libre” para manipular, mentir, coaccionar y aprovecharse de los demás: lo que ocurre en la política hoy día, sin ir más lejos. ¿Se dará cuenta algún New Age alguna vez que sus propias creencias son las que permiten que haya gobernantes corruptos y potencias que asesinan sin piedad a las poblaciones de otros países? ¿Que son responsables, en definitiva y por mor de esas creencias, de que el Mal gobierne la Tierra?
Por el otro lado, obviamente, las religiones tradicionales (salvo sus místicos, recuerda) han propagado que Dios estaba fuera, con la consiguiente autoridad que les ha conferido a aquellos que dicen saber lo que piensa. Es contra esta autoridad, mal empleada, contra la que los gurús new age se han rebelado, la base de que ahora REACCIONEN CONTRA ESA CREENCIA (ESTO SÍ ES PENSAMIENTO DUAL) y nieguen que Dios está afuera, afirmando que sólo está “adentro”.
Lo curioso de todo es que una gran parte de la comunidad New Age no han renunciado a la noción del Bien y del Mal sino que la han sustituido por “La dualidad”: “lo que es dual es malo y lo que no es dual, es bueno“, una creencia procedente de la mecánica cuántica (mal entendida). Por supuesto, les pondrás en un compromiso si les preguntas si está bien violar a un niño o poner una bomba en un mercado o en una iglesia: ¿es dual o no es dual?
Sinceramente, lamento tener que decir obviedades tan obvias pero la solución a este DIFICILÍSIMO DILEMA es tan sencilla como que DIOS ESTÁ DENTRO Y ESTÁ AFUERA; ESTÁ EN TODAS PARTES. (Una solución No dual, fíjate por donde).
Es evidente que hay una estructura cósmica y unas reglas de la energía y de la rotación de los astros celestes que la gobiernan: esa entidad que las gobierna es a lo que llamamos Dios (o sus “ayudantes”, las diferentes entidades celestiales que también forman parte de Dios, como enseña El Libro de Urantia, la mejor lectura para comprenderlo).
Dios es esa energía que lo inunda todo Y NOS CONECTA ENTRE NOSOTROS, y al mismo tiempo, Dios está en cada uno de nosotros y somos tanto Dios, en tanto en cuanto trabajamos en pro de la Unidad y combatimos la mentira y la injusticia, que es aquello que nos desune.
La próxima vez que escuchéis a algún gurú new age negar al Dios “de fuera”, desafiadle con estos comentarios: ya veréis cómo salta de su aparente poltrona.
PD: No todas las personas que forman parte, consciente o inconscientemente, del Movimiento New Age, han sucumbido al lavado de cerebro de estas ideas. Mis disculpas a los que no.
PD 2: Filosóficamente hablando, la rebelión de Lucifer comenzó de la misma manera: como los New Age, Lucifer se dio cuenta de que “era dios”, es decir, que tenía a dios en su interior, y en ese momento decidió crear un mundo regido por su propio deseo y hacer como si Dios no existiera (aunque, obviamente, sabía que existía).
En realidad, la experiencia trascendental de un místico y la de un luciferino es prácticamente igual; la diferencia es que, mientras el místico decide, humildemente, unir sus fuerzas con el Creador para extender el Bien, el luciferino decide aprovecharse de los demás (con el gran conocimiento ganado) en provecho propio. Por eso todos los gurús New Age acaban montando su propia secta, donde hacen realidad sus deseos, exactamente igual que Lucifer, y son incapaces de ponerse de acuerdo con ningún otro gurú, obviamente: cada uno “gobierna” su propio mundo pero en realidad, le importa un comino lo que le pase al resto.
Escrito por: http://www.rafapal.com/
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