24-01-2014
Estamos alcanzando ahora colectivamente ese tipo de madurez que ha dejado pequeños nuestros zapatos infantiles de que otros nos digan qué hacer, qué pensar, cómo actuar y cómo ser.
En esencia, de esto se trata la elevación de la conciencia. Es ir más allá de la niñez y los tumultuosos años de la adolescencia para pasar al estado del verdadero adulto y madurez.
Es la Era Dorada de la Sabiduría que está amaneciendo ahora con la Era de Acuario. Sobreiluminando todo este proceso está nada menos que Sofía, la Diosa de la Sabiduría, en conjunción con Atena y Artemis. Estas tres Diosas forman la tríada del regreso a un estado de saber y sabiduría internos.
Cuando uso el término “Diosa’ lo uso con el entendimiento de que todas estas Diosas están representando un tipo de arquetipo, un tipo de saber interno que, en esencia, está allí para mostrarnos el camino.
Ellas son, en consecuencia, los arquetipos mostradores del camino que nos están mostrando el camino más elevado, el camino de la sabiduría, el sopesar y traer a un perfecto equilibrio la balanza, mientras que Artemis nos está mostrando el camino de la pureza.
En nuestra juventud y principios de nuestros años veinte tenemos la tendencia de experimentar; no estamos bien formados todavía.
Seguimos buscando nuestros propios límites y nos desviamos fácilmente por la opinión de las masas.
Tenemos que ser “geniales/padre/chévere” y “modernos” y ser aceptados por mucha gente.
Al correr de los años más formamos nuestro propio tipo de vida. Repentinamente captamos en algún momento que no podemos placer a toda la gente.
No podemos volvernos alguien que no somos. Hemos tratado de encajar en las cajas de otra persona, pero encontramos que no encajábamos.
Es como cuando uno se prueba zapatos: si los zapatos no encajan perfectamente bien se van a sentir incómodos, nos causarán ampollas, nos apretarán los dedos, o los perderemos constantemente porque nos son demasiado grandes.
Los mostradores para esta nueva Era eran los “hippies”, los niños de las flores de los años sesenta: los Beatles, “el poder de las flores” [el poder de los hippies, sus ideales y principios].
Ellos crearon un tipo de revolución, que se sigue sintiendo aún ahora. Repentinamente se volvió “actual”/”moderno” meditar e ir en búsqueda de un Guru.
Ellos pusieron a la sociedad de cabeza en ese tiempo, y muchos de esos hippies se han vuelto los Ancianos de nuestros tiempos.
Tanto como ellos crearon esa revolución, las nuevas generaciones añadieron entonces a eso y algo profundo dentro de la humanidad empezó a cambiar.
Cuando veo cómo fue educada mi madre y cómo fui educada yo, entonces ya hubo una brecha enorme.
A medida que la humanidad se liberó de los corsés Victorianos y Eduardianos y despidieron las reglas sexuales, esa misma rebelión demasiado exuberante trajo consigo un nuevo vacío.
La tecnología cambió al planeta y el mundo se ha empequeñecido pues ahora nos podemos comunicar con facilidad via Skype, Internet etc.
Y sin embargo, de alguna forma está sucediendo un profundo cambio en todo esto. Ese cambio fue resumido elocuentemente por el Dr. Victor Frankl como la “búsqueda de un significado.”
Sí, uno pudiera poner el mundo de cabeza, pero a fin de cuentas viene un tiempo en sus vidas cuando se enfrentan a ustedes mismos.
Sí, ustedes mismos. Ese profundo vacío en su interior, esas sombras, esos dragones y todas esas cosas interiores que nos acechan por la noche.
Cuando todo estaba dicho y hecho, cuando habían hecho todo, solamente quedaban ustedes y ningún lugar adónde ir.
En esta etapa algunos meten la quinta con las drogas, el alchohol… abusan – tratan cualquier cosa para hacer desaparecer ese vacío.
Algunos son “junkies” de adrenalina, otros junkies del sexo, y algunos más son junkies simplemente por serlo.
Luego descienden las noches oscuras del ser. Uno puede ir al doctor, adormilar el dolor del cuerpo, pero ese dolor interno no se va a ir.
Profundo en nuestro interior sabemos que algo está mal…. Algunas personas han tenido experiencias cercanas a la muerte para darse cuenta repentinamente de que han gastado sus vidas en la búsqueda de un significado, y las han gastado en todas las cosas erróneas.
Cuando descienden las noches oscuras del ser y no hay otra salida más que viajar más profundo en búsqueda de respuestas, entonces empiezan a suceder los milagros pues mientras más profundo van, más se conectan a algo mayor que la suma total del yo – que es la Fuente infinita de todo Amor y Vida, y el Creador de todo.
Es la Fuente de toda vida y energía, y es la vida misma mirándolos fijamente de regreso.
Es como si se estuvieran viendo a sí mismos por primera vez en el espejo cósmico de la vida y el Amor. “¿soy éste yo?” preguntan ustedes.
A medida que las voces les susurran de regreso, ustedes encuentran que lo que están viendo reflejado es su Ser – esa energía, ese inmenso y eterno YO SOY ESE YO SOY, que ha estado allí todo el tiempo.
Mientras más empiecen a comunicarse con este SER, más se encontrarán a sí mismos y su significado y propósito más elevados en la vida.
Hay momentos de “AJÁ” y de la bombilla de luz encendiéndose, y lentamente pero de seguro ustedes empiezan a cambiar.
En este momento la oruga se convierte en mariposa. Es el momento de la transformación de lo viejo a lo nuevo…..
A medida que lo nuevo asume el mando, llega un estado de paz interna, de contento interior y Amor interno que abarca la eternidad.
Es el estado de Ser que es totalmente íntegro. Está firmemente anclado en la Divinidad y firmemente anclado en el Ser, y en todo lo que existe en toda la Creación.
Aquí es donde uno empieza a accesar la sabiduría, el saber interno, la guía y sabiduría de su propio Ser y Grupo Álmico, y más que esto, la Totalidad Cósmica porque uno está íntimamente ligado a la Divinidad – el Padre/Madre/Dios.
Aquí es donde surge esa Sofía pues Sofía es la Flama Tríada Santa. Ella personifica el Amor, la Sabiduría y el Poder.
Ella blande la poderosa espada de la Verdad, la Integridad, el Poder y la Sabiduría.
Ella corta a través de toda la escoria mientras está de pie allí – plenamente allí, hermosa en su poder.
Cuando Ella está allí, arde a través de todo lo que no es auténtico y verdadero, y hace arder una senda para quemar toda escoria, todo lo que ya no sirva al Bien Mayor.
A medida que hace sentir su reino, Ella saca a relucir la verdad – aquello que ha permanecido oculto y enterrado bajo pilas de mentiras y control.
Corta toda esclavitud, toda cadena, trayendo la Verdad, la Sabiduría y el Poder Más Elevados.
Pues Ella sostiene la Flama Blanca – la Flama de la Pureza, y esta Flama es una de la más elevada vibración, y nada que no sea de esta elevada vibración puede sostener la forma – pues todas las mentiras son transmutadas: solamente queda la verdad más pura.
Así como Atena y Ma-At sostienen las balanzas de la justicia y el equilibrio, y Artemis la de la pureza, Sofía, junto con sus hermanas, trae masivos cambios al planeta pues el poder de la Verdad, el poder de la Sabiduría, el poder de la Justicia y el Equilibrio están ahora barriendo por delante.
Y por encima de todo esto está la Flama Tríada del Amor, el Poder y la Sabiduría.
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Traductor: Gloria Mühlebach
WebSite: http://despertando.me/?p=140877
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