
1936: EL GOBIERNO DEL PSOE PERPETRA EL ROBO DEL SIGLO
En la imagen, 112 estanterías con un total de 34 toneladas de oro. El "oro de
Moscú" necesitaría de 1700 estanterías como éstas.
Ocurrió hace ahora 83 años, pero las leyes de (des)memoria histórica prefieren ignorarlo, no sea que alguien ate cabos de por qué se traslada alguna ajada momia justo en este momento (como si con ello se atendiese la más perentoria necesidad del país): el gobierno de la República, extralimitándose en sus funciones, y de una manera claramente ilegal, confiscó una cantidad
exhorbitante de oro y plata del Banco de España para entregárselo a la Unión Soviética como tributo por su apoyo y a Méjico para preparar un exilio dorado a los políticos que huyeron allí abandonando a sus partidarios a su suerte. Como recuerda en su página Rafapal, ese oro, que podría cancelar nuestra deuda, tendría hoy día un valor de más 25.000 millones de euros. Gracias, PSOE.

La guerra empezó en 1936, pero ya desde los meses siguientes los mismos políticos que exigían a los españoles resistir hasta la última bala se preparaban un exilio dorado con el inmenso patrimonio robado tanto al Estado como a los ciudadanos.
La madrugada del 14 de septiembre de 1936, a solo 3 semanas de iniciarse el conflicto, entraron en el Banco fuerzas de carabineros y milicias, enviadas por el ministerio de Hacienda de acuerdo con los comités de la UGT (socialistas) y de la CNT (anarquistas) en el mismo Banco, a las que acompañaban 50 ó 60 metalúrgicos y cerrajeros y un grupo de empleados de banca pertenecientes al Sindicato de Madrid. El cajero principal, al ver que la reserva de oro iba a ser evacuada, se suicidó en su despacho. Su ética no le permitió ser cómplice. Los consejeros Martínez Fresneda y Álvarez Guerra denunciaron la extracción del oro por constituir una ilegalidad y presentaron su dimisión.

Hay que añadir que los socialistas se dieron prisa porque la guerra había empezado solamente dos meses antes, el 18 de julio de 1936. La reserva española de oro había sido registrada por las estadísticas internacionales en mayo de 1936 como la cuarta más grande del mundo
Los principales responsables de esta incautación fueron los miembros del PSOE Juan Negrín, que antes de ser presidente del Gobierno fue ministro de Hacienda, e Indalecio Prieto.
El 25 de octubre Negrín ordenó el traslado de la totalidad del oro depositado en las bóvedas del Banco de España, en Madrid, al puerto de Cartagena. Eran “siete mil ochocientas cajas llenas de oro, amonedado y en barras, oro que constituía la mayor parte de las reservas del Banco de España”.

“Saqueadas las reservas metálicas del Banco de España, se procedió de modo sistemático a la confiscación del dinero, divisas, valores y efectos de propiedad de particulares que existían en depósito y en paquetes lacrados en la Banca privada. Para ello se dictan disposiciones conminatorias, como los Decretos de 3, 10 y 16 de octubre de 1936 [ ]…
“… El día 25 de octubre de 1936 se personó Francisco Méndez Aspe en Cartagena, y, de acuerdo con Negrín, ordena que por la noche se extraigan sigilosamente de los polvorines siete mil ochocientas cajas de oro, de un peso aproximado de setenta y cinco kilos cada una, que custodiadas por claveros de confianza como José Velasco y Arturo Candela (quienes quedaron presos en Rusia) son transportadas en camiones y cargadas en los buques Kine, Neve y Volgoles, que zarparon en dirección a Odessa,”
A los pocos días de la extracción del oro del Banco de España, los mismos funcionarios, utilizando idénticos procedimientos a los empleados con el oro, recogieron la plata, por una cuantía total de 656.708.702,59 pesetas, que fue vendida a los EE.UU. y a Francia entre junio de 1938 y julio de 1939 por una cifra algo superior a 20 millones de dólares (una parte fue embargada por las autoridades francesas).

El oro tardó tres noches en ser embarcado, y el 25 de octubre los cuatro barcos se hicieron a la mar rumbo a Odessa, puerto soviético del Mar Negro. Acompañaban a esta expedición, como personas de confianza, cuatro claveros del Banco de España (clavero era un custodio de las llaves de las cajas fuertes del Banco): Arturo Candela, Abelardo Padín, José González y José María Velasco. Cabe indicar, asimismo, que Orlov había reseñado 7.900 y Méndez Aspe 7.800 cajas; el recibo final fue por 7.800, y no se sabe si fue un error o desaparecieron 100 cajas de oro.
En marzo de 1939 Largo Caballero criticaría la gestión de Negrín en los siguientes términos:


Como colofón a lo poco que ha aprendido este país en lo referente a cómo políticos nefastos gestionan su riqueza, no está de más recordar que siendo el socialista Pedro Solbes ministro de Hacienda vendió un tercio de las reservas de oro de España unos meses antes de que el oro subiera casi un veinte por ciento … negocio redondo para los comisionistas y catastrófico para un país al que la élite globalista ha ordenado hundir.
Hay demasiadas cosas que, o no se saben, o no interesa que se sepan ...
(Artículo completo en https://laverdadofende.blog/)


Fuente: https://astillasderealidad.blogspot.com/
No hay comentarios:
Publicar un comentario